Desde los años noventa a nuestros días cada vez es más frecuente que las personas se sientan cansadas todo el día o durante largos periodos de tiempo. En ocasiones no encontramos la explicación a tener ganas de dormir constantemente y podemos caer el errores como abusar del café.
Tener poca calidad del sueño puede ser una de las
principales causas. En ocasiones creemos estar durmiendo las horas necesarias
cuando en realidad el cuerpo no está descansando como debiese y eso afecta a
nuestro bienestar.
Este mal dormir puede estar provocado por un tipo de vida
sedentaria. Pasar muchas horas sentados hace que el cuerpo se vuelva más vago y
perezoso o quizás no estemos quemando la energía suficiente como para necesitar
dormir más profundamente.
Las soluciones más efectivas a esto son por ejemplo,
practicar más deporte. Una actividad física moderada no va a hacernos sentir
más cansados, si no que activará nuestro cuerpo, nos hará sentir más motivados
y al final del día dormiremos de forma más profunda.
Otra de las soluciones podría ser beber agua más a menudo. A
veces cuando tenemos sed optamos por bebidas azucaradas y eso es peor para
nuestros órganos y nuestro cerebro. Necesitamos mucha agua para que el cerebro
funcione adecuadamente. Quizás el problema sea la deshidratación y eso nos esté
haciendo sentir más lentos o desconcentrados.
Otro motivo al cansancio extremo podría ser una situación de
estrés o depresión. A veces no nos damos cuenta de que estamos padeciendo una
depresión o un momento estresante en nuestra vida ya que no lo relacionamos
directamente con el cansancio. Ante esto, técnicas como apuntar en un papel lo
que nos preocupa antes de dormir o realizar ejercicios de relajación o
meditación puede sernos de gran ayuda.
Si nuestro problema no es nada de lo anterior, deberíamos
empezar a pensar que el cansancio venga provocado por una enfermedad más grave.
Una de las enfermedades relacionadas con el sueño más
presente en nuestros días es el Síndrome de Fatiga Crónica (SFC). Este síndrome
se caracteriza por un cansancio constante inexplicable, dificultad para
realizar cualquier acto cotidiano o un sueño poco reparador.
Esta enfermedad puede estar provocada en un inicio por un
virus, gripe o infección, aunque no se considera un problema hasta pasados los
seis meses de cansancio inexplicable.
Además, al ser un síndrome nuevo, en ocasiones el paciente
tiene problemas para conseguir un diagnóstico claro. Por ello, se involucran en
visitas al médico constantes hasta dar con una respuesta.
En España sólo contamos con tres especialistas en este
síndrome y todos se encuentran en Cataluña. Aparte de esto, no existe un
tratamiento específico que aminore los efectos del cansancio. En definitiva lo
que se recomienda es que el paciente se conozca bien a sí mismo, sepa donde
están sus límites físicos y adapten su vida a estas limitaciones hasta que se
encuentre un medicamento eficaz.
Por último, uno de los causantes más famosos del cansancio
extremo puede ser los problemas de insomnio. Hasta un 45% de la población
mundial tiene problemas para conciliar el sueño. Por ello, escoger las técnicas
adecuadas y los hábitos recomendables para dormir serán clave a la hora de
evitar el cansancio.
Uno de los trucos más famosos para quedarse dormido es el de
respirar profundamente cuando nos acostemos. Es la técnica conocida como
“respiración 7-11” y puede ser el sustituto efectivo de contar ovejas.
Relájate, concéntrate en tu respiración y verás como consigues dormirte pronto.
La dieta, como siempre, es muy importante para conciliar el
sueño. Evitar alimentos como el chocolate o el alcohol antes de dormir es muy
recomendable. Por otro lado, las hierbas en té como la manzanilla o lavanda también
pueden ser de gran ayuda.
Como último consejos, practica mucho deporte a diario y
sobre todo evita el móvil, tablets o televisión en el dormitorio justo antes de
dormir. La luz de las pantallas provoca insomnio y no es nada recomendable.