martes, 28 de octubre de 2014

Pasos para mejorar la autoestima





Todos hemos escuchado la palabra autoestima en numerosas ocasiones pero ¿Qué es realmente la autoestima?

La autoestima se define como un conjunto de percepciones pensamientos y tendencias de comportamiento dirigidas hacia nosotros mismos, hacia nuestra manera de ser y de comportarnos, y hacia los rasgos de nuestro cuerpo y nuestro carácter. Esta imagen que tenemos de nosotros mismos es un factor determinante en la vida de todo ser humano, pues influye en la manera que tenemos de  relacionarnos con los demás y de comportarnos en sociedad. Las personas que tienen autoestima alta suele ser sociables y confiadas, mientras que aquellas con baja autoestima son generalmente personas tímidas y buscan en los demás una valoración que no son capaces de darse a sí mismas, temiendo constantemente ser rechazadas.

Algunos de los síntomas que presentan las personas con baja autoestima son:

- Falta de ambición y de metas, al no verse capaz de superar obstáculos difíciles.
- Miedo a los cambios como la aceptación o la búsqueda de un nuevo empleo, dejar una relación sentimental en la que no se está bien...
- Actitud negativa frente a la vida. El individuo ve su alrededor como un entorno hostil.
- Búsqueda constante de opiniones. Las personas con baja autoestima buscan frecuentemente las opiniones de los demás mostrando una falta de confianza en la toma de decisiones personales.
- Necesidad de contar con alguien que se considera más fuerte para afrontar las dificultades, lo que aumenta el riesgo de dependencia de tales personas.
- Descuido de la apariencia física o, en el polo apuesto, preocupación excesiva por ésta para tratar de ocultar la inseguridad.
- Estilo de vida poco saludable, lo que implica no tener como una dieta sana ni practicar ejercicio físico de manera regular.
- Timidez y miedo constante a hacer el ridículo.
- Miedo al fracaso, al futuro y a numerosas situaciones en las que la persona se siente en peligro.

Pero, ¿Qué podemos hacer para mejorar nuestra autoestima y poner fin a estos pensamientos negativos?

Para empezar hay que ser conscientes de que tenemos un problema. Una vez detectado el problema pueden seguirse algunos pasos como rechazar las críticas destructivas de los demás, ya que no nos ayudan a crecer y solo consigue que nuestra autoestima empeore; considerar los errores como oportunidades de aprendizaje; probar cosas nuevas; fijarnos metas y diseñar un plan para conseguirlas; colaborar en labores sociales; hacer ejercicio; y disfruta de nuestro tiempo libre junto a personas que nos importan y haciendo cosas que realmentenos gustan.

En muchos casos será necesaria la ayuda de un terapeuta que actuará a modo de guía, ayudando a la persona a quererse a sí misma y a darse cuenta de lo que la hace única y especial.

martes, 21 de octubre de 2014

El Magnesio, un mineral imprescindible para nuestra salud




El magnesio es uno de los metales más comunes en la naturaleza. Es el octavo elemento más abundante en la tierra y el segundo, después del sodio, en el mar. Además, El magnesio es uno de los minerales que necesita nuestro organismo para mantener su equilibrio natural.

Los beneficios más conocidos del magnesio son sus propiedades como relajante muscular y coadyuvante en la absorción de calcio. Participa además en la duplicación del ADN y en la transmisión de los impulsos nerviosos, regula los niveles de azúcar en sangre, interviene en la relajación y contracción de los músculos previniendo calambres, contracturas, vértigo, mareos o fatiga, favorece la absorción y metabolismo de otros minerales y ayuda a regular la temperatura corporal además de mantener sanos huesos, articulaciones, cartílagos y dientes.

Es considerado también un poderoso protector cardiovascular, previene los espasmos de las arterias coronarias, mantiene las tasas de colesterol en niveles normales y regula el ritmo cardiaco y la presión arterial.

Un déficit o bajo nivel de magnesio en el consumo diario puede generar enfermedades crónicas y comprometer seriamente la salud. La carencia de magnesio afecta principalmente a las personas que consumen alimentos procesados, y en general por una dieta pobre en nutrientes naturales.

Una manera fácil de recordar cuales son los alimentos que son fuentes buenas de magnesio es relacionarlos con las fibras. Los alimentos que tienen un alto contenido de fibra tienen también un alto contenido de magnesio. Las fuentes alimenticias de magnesio incluyen las legumbres, los granos enteros, las verduras (especialmente el brócoli, el zapallo y las verduras de hojas verdes), las semillas y los frutos secos (especialmente las almendras). Otras fuentes incluyen los productos lácteos, las carnes, el chocolate y el café. El agua con un alto contenido mineral, el agua “dura”, es también una fuente de magnesio.

Para potenciar el efecto del magnesio se recomienda tomarlo 30 minutos antes de las comidas o, incluso, en ayunas. Acompañado de vitamina C o B6 se facilitará su absorción.

miércoles, 8 de octubre de 2014

La unión entre risa y salud

Quizás no sepamos que cuando nos reímos se liberan hormonas y neurotransmirsores que ayudan al organismo a protegerse de infecciones  y a fortalecer el corazón.
La risa ayuda a desplegar la serotonina, una monoamina neurotransmisora que tiene efectos calmantes en nuestra persona.

Al reírnos estamos ejercitando la zona del vientre y el diafragma, algo que nos ofrece una respiración más profunda y efectiva, liberando endorfinas que fortalecen el sistema inmunológico y aumenta el número de anticuerpos como la inmunoglobulina A y linfocitos T que neutralizan bacterias, virus o parásitos.

La risa también actúa como ejercicio aeróbico, convirtiéndose en un importante entrenamiento cardiosaludable; y como relajante muscular, moviliza una enorme parte de los músculos del organismo, favoreciendo la descarga de tensión muscular. Además, funciona como un “masaje interno” que facilita la digestión y la eliminación de toxinas, ácidos grasos y aumenta el peristaltismo intestinal, mejorando el estreñimiento.

A nivel psicológico y emocional, la risa es el mejor método que podemos encontrar para tener una vida saludable y feliz, pues regula los niveles hormonales que se encargan del estado anímico. Así, reducimos el estrés, suavizamos los síntomas de depresión y ansiedad, aumentamos la memoria, el pensamiento creativo y la resolución de problemas, mejoramos la interacción personal y las relaciones sociales, así como aumentamos la amigabilidad, la colaboración, la solidaridad y la conexión con otras personas.
 


miércoles, 1 de octubre de 2014

La mala circulación, un enemigo a combatir

Todos estamos expuestos a lo conocido popularmente como “mala circulación”. Molestias que se producen debido a un mal funcionamiento del sistema circulatorio.

Las causas pueden ser diversas, pero quizás una de las más usuales es la denominada atesclerosis,  un proceso degenerativo que conlleva a la obstrucción en las arterias provocando el cese de aporte sanguíneo en ciertas partes del cuerpo, y originando graves consecuencias como infarto de miocardio o infartos cerebrales. 


Entre las causas de este desorden sanguíneo también podemos encontrar venas varicosas, producidas por permanecer mucho tiempo de pie o por edad avanzada; obesidad; trombosis venosa profunda, diabetes; falta de ejercicio, el consumo de cigarros, el embarazo, permanecer en la misma postura largos períodos, la hipertensión y la hipercolesterolemia. Además, y en casos extremos, la mala circulación en las piernas puede incluso llegar a producir la formación de coágulo sanguíneos.

Si tenemos una mala circulación, quizás alguno de los consejos que proponemos en este blog te ayuden a mejorarla.

Alimentación

Debemos mejorar nuestra alimentación. La comida influye en el proceso sanguíneo, por lo que controlar nuestra dieta es algo fundamental. Los alimentos altos en grasas o azúcares  harán que la sangre sea más viscosa, impidiendo una correcta circulación de nuestra sangre. ¿Qué comer? Sobre todo, y lo más adecuado para personas con mala circulación, es la ingesta de frutas y verduras, pues su alto contenido en fibra disminuirá la presión sanguínea, desembocando en una mejor circulación.

Ejercicio

Pasar la mayor parte de tu tiempo sin moverte o llevar una vida sedentaria es una de las peores cosas que podemos hacer para combatir una mala circulación. Si aumentamos el ritmo cardíaco con el deporte, las arterias se dilatarán, permitiendo que la sangre tenga una buena fluidez y generando también un correcto bombeo del corazón, que provocará que la sangre llegue a las zonas más altas y bajas del cuerpo de una forma correcta.

Tabaco
Los componentes químicos del tabaco afectan al correcto funcionamiento de la circulación, por lo que recomendamos que evitéis este hábito, que perjudica no solo nuestra circulación, sino nuestra salud en general.

Obesidad
Debemos cuidar nuestro físico, pues un elevado peso traerá consigo presión y tensión alta.

Baños de agua fría
Si conviertes en rutina este hábito, podrás comprobar cómo tu circulación mejora y te sentirás muy aliviado después de estos baños.

Junto a todos estos consejos, también debemos destacar aspectos positivos en la mejora de tu circulación como la reducción de ingesta de alcohol y cafeína, ya que estrechan los vasos sanguíneos; evitar sentarse en sillas que ejerzan presión sobre los muslos, para no cortar la circulación de las piernas; o el uso de medias de compresión para estimular la circulación.