jueves, 23 de abril de 2015

Calor y mala circulación van de la mano



La insuficiencia venosa crónica se caracteriza por unos síntomas como hinchazón, sensación de pesadez, calambres, opresión, abultamientos en la piel... todo esto es debido en gran parte a la genética, pero también es muy importante cuidar nuestros hábitos alimenticios y adquirir otros hábitos saludables como evitar el sedentarismo, la exposición directa a fuentes de calor, llevar prendas demasiado ajustadas...pero a veces nada de esto es suficiente y se nos hace insoportable cargar con nuestras propias piernas.

Muchas personas se quejan de tener las piernas pesadas e hinchadas en verano. Si las piernas duelen y se hinchan, es debido a una excesiva retención de líquidos que provoca un edema periférico. Este fenómeno se ve amplificado en verano porque el calor dilata los vasos sanguíneos, reduciendo sus capacidades elásticas necesarias para bombear la sangre desde las extremidades hacia el corazón, se produce una acumulación de sangre en las venas de las extremidades inferiores creando al principio una sensación de presión que acaba evolucionando en edemas y/o varices. Además, cuando el cambio estacional es rápido, este fenómeno se ve amplificado por una falta de adaptación.

Para ello hay algunos remedios naturales como la acupuntura, los masajes dan muy buenos resultados para los problemas de circulación. También son muy efectivos los diuréticos naturales, ya que muchas veces este malestar es ocasionado por una excesiva retención de líquidos.

Visítanos y daremos "alas" a tus piernas cansadas para que no te pese el verano y puedas disfrutar de él.


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